sábado, 31 de mayo de 2008

Sin nombre

Qué dorado anillo rodeó tu cintura de nácar
Quién libó tu dulzura, espuma de leche fresca
Quién tendió el lecho de seda negra
Quién bordó con hilos
diamantinos tu tocado
Quién cubrió así tu cabellera de nieve
Sonreías igual
mientras eras mancillada



Cris.

3 comentarios:

ade dijo...

- Que bello y que triste.

Cristina dijo...

Sí Ade. Pero es lo que hay, vió?
Gracias y besos
Cris.

Nanu dijo...

Ponele nombre cris

Es muy bello ese poema para quedar asi , sin titulo

Besitos
Nos vemos

Soledad

Soledad
CRUZAGRAMAS: un grupo de escritores en busca de alternativas
Abrir la puerta de mi casa es todo un desafío. Mi casa y mi corazón. Y no es necesario usar llaves. En este pequeño lugar del universo no son necesarias porque aquí está todo a flor de piel: olores, sabores, murmullos, gritos y silencios. Luces y sombras de ciudades y desiertos. La vida, el amor y la muerte. Y las palabras como hilo conductor. Sólo las usaremos para abrir, si fuera preciso, diminutos cofres de confidencias, sueños y locuras varias compartidas con todos ustedes.
Bienvenidos a casa!
Cris.